Soñar es difícil en Colombia
Médicos Sin Fronteras ha reclamado una mayor atención a las víctimas del conflicto armado que sufre Colombia desde hace más de cuarenta años. La organización denuncia la falta de acceso a poblaciones aisladas en zonas donde se dan enfrentamientos y que impiden que la población civil reciba asistencia humanitaria. Al mismo tiempo, MSF quiere llamar la atención sobre las personas que se ven forzadas a desplazarse a grandes áreas urbanas, ya que se enfrentan a una serie de complejos trámites que les excluyen en gran medida de cualquier tipo de atención por parte de las autoridades. Hay enormes vacíos de asistencia médica física y mental de la que esta población está especialmente necesitada.
MSF, que lleva asistiendo a víctimas de la violencia y de otros desastres en Colombia, durante más de 20 años, ha inaugurado hace dos semanas en Madrid la exposición multimedia "Sueño en riesgo: atrapados en el círculo de la violencia en Colombia" en la que una colección de imágenes, dibujos infantiles y testimonios audiovisuales narran en primera persona el drama de las víctimas del conflicto en este país.
La muestra, que se puede visitar on-line en la página de la organización (www.msf.es), es aterradora. Los dibujos de los niños y niñas colombianos reflejan la tragedia mejor incluso que las fotografías: son imágenes crudas de una guerra constante.
La cotidianidad de la violencia, la miseria del desplazamiento o la incertidumbre del regreso a una casa que puede haber dejado de existir sumen a la población colombiana en una situación de caos permanente. El caso de los desplazados, más de tres millones y medio -el gobierno sólo reconoce menos de la mitad-, es una de las vertientes más terribles del conflicto y de las más olvidadas.
Médicos Sin Fronteras denuncia el olvido e incluso la incomodidad que la misma existencia del inmenso colectivo de desplazados genera en la opinión pública y entre las organizaciones responsables.